Los municipe se niegan a hablar ante el temor de losdelincuentes |
En el barrio Capotillo pocos duermen tranquilos. En las noches, casi
siempre a oscuras por falta de energía eléctrica, las ráfagas de
disparos mantienen con los nervios de punta a los residentes en el
populoso sector. Los programas de seguridad policial han sido un
fracaso, porque “policías mal pagados” se dejan corromper por los
delincuentes, creen los munícipes.
Ante la ola de delincuencia que afecta al sector, los residentes se
han organizado en núcleos, por cuadras, para establecer un control de
los callejones y cercar la zona por donde los malhechores se comunican
para atracar y robar, informó Abel Rojas, dirigente comunitario. Explicó
que en las calles Respaldo 6, Respaldo 8, Respaldo Doctor Betances, 16,
Diego Velásquez y 38 fueron colocadas puertas de hierro en cada
callejón y se cierran a las 7:30 de la noche. “Si el problema son los
pasos por los callejones, nosotros nos resguardamos”, aclaró.
De igual manera, los mismos vecinos iluminan esos callejones con bombillas que alimentan con los inversores de sus viviendas.
Es tanta la desesperación que un grupo de 70 personas ha contemplado
adquirir flotas que costearán con sus propios recursos para mantenerse
comunicados en el día y en la noche y así tratar de evitar que personas
de trabajo sean asaltadas al llegar a sus viviendas.
“El 9-1-1 de Capotillo debe ser la misma comunidad antes que las
autoridades, aunque no le quitamos su mérito”, indicó. Rojas aseguró que
Capotillo nunca ha sido un barrio tranquilo, sin embargo, el caos se
agrava porque son los menores quienes integran los grupos de asaltantes.
Los munícipes se niegan a hablar ante el temor de ser perseguidos por los delincuentes.
Amaury Soler.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario